Quedémonos con lo que nos hace felices en la vida

¿Has sentido alguna vez que la diabetes se ha apoderado de tu vida? Esta sensación de impotencia tan habitual puede derivar en estados depresivos o de tristeza. A su vez, sentirse triste puede afectar a la motivación para cuidar de nosotros mismos. ¿A que en ocasiones parece un círculo vicioso? «La diabetes me hace sentir triste, por lo que no disfruto de la vida ni me cuido. Entonces, las mediciones del azúcar en sangre empeoran y me deprimo aún más».

No es culpa tuya y, por supuesto, no te pasa solo a ti.

Si ésta es tu situación, no eres la única persona a la que le pasa. Sentirse así no es culpa tuya. Hay estudios que afirman que alrededor del 30 % de las personas con diabetes puede estar pasando por algún tipo de depresión. Esta relación entre la diabetes y la depresión no es sorprendente si tenemos en cuenta los aspectos médicos y emocionales de vivir con diabetes.

¿Cómo puedes adoptar un punto de vista más positivo y sentirte con motivación para «ser más feliz?

Puede que suene sencillo, pero empieza por pensar en las actividades que te resulten gratificantes e importantes. ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? ¿Qué te hace feliz? ¿Hay algo que siempre hayas querido probar?

Quizá organizar una merendola en el parque, dar un paseo con alguien de la familia o un amigo, ir a clase o a la biblioteca. Puede que te atraiga alguna afición, como coleccionar recortes o antigüedades. También pueden ser actividades de temporada, como recoger frutos del bosque con la familia, hacer un castillo de nieve con los hijos o los nietos o barrer hojas en otoño. Planifica las próximas vacaciones hasta el último detalle, aunque falten meses. Haz algo por ti y no permitas que la diabetes te impida ver que puedes sentirte mejor.

Acabemos con ese círculo vicioso.

Sentirte mejor y con la sensación de tener el control de tu vida puede motivarte más a medirte el azúcar en sangre con mayor frecuencia y tener un mejor control, lo que mejorará tu ánimo y nivel de energía. Antes de que te des cuenta, le habrás dado la vuelta a ese círculo vicioso. Estas son algunas actividades que te pueden resultar beneficiosas:

  • Cocina un plato saludable y delicioso
  • Acurrúcate al lado de la chimenea con un libro nuevo y una manta
  • Empieza a escribir un diario
  • Escucha música relajante
  • Apúntate a clases de yoga, pintura, informática u otra actividad que siempre hayas querido hacer
  • Queda con alguien para tomar café, té o ir al cine una vez a la semana
  • Apúntate a un grupo de baloncesto con amigos
  • Participa en eventos de la iglesia o del centro comunitario
  • Haz un voluntariado en un hospital, un evento benéfico o en la biblioteca
  • Apúntate a una asociación local o al gimnasio

Si necesitas más ideas sobre cómo salir del estado depresivo, lee estas cinco actividades que mejoran el ánimo al instante, de Psychology Today.

Fuente:

Polonsky WH. Diabetes Burnout: What to Do When You Can't Take It Anymore. Alexandria (Virginia): American Diabetes Association; 1999.