¿Cuál es la tecnología actual para la gestión de la diabetes?

Si en el anterior artículo hemos podido ver cuáles pueden ser los beneficios asociados al uso de la tecnología, el objetivo de este artículo es describir cuáles son estas tecnologías en diabetes. No entraremos en marcas comerciales ni en nombres concretos ya que hay muchos y seguramente no todos estarán disponibles en todos los lugares, pero sí la intención es definir conceptos y explicar el funcionamiento de éstos, para poder resolver algunas dudas que probablemente muchos tengáis.

Aplicaciones para la diabetes 

Existen múltiples aplicaciones o apps en diabetes. Podríamos clasificarlas en aquellas centradas en el registro o el seguimiento de algún valor como el de la glucosa, apps médicas dirigidas a profesionales, apps centradas en nutrición y otras más centradas en el ejercicio. También existen algunas que permiten vincularse al medidor volcando los datos para obtener la información de una manera ordenada y con mayor facilidad para interpretarla, y otras más dirigidas al bienestar o blogs, foros o redes sociales para compartir situaciones entre personas con diabetes, familiares o sus cuidadores. Es importante fijarse en Apps reguladas (como productos sanitarios con marcaje CE), certificadas (normalmente cumplen algún requisito de la industria) o bien apps con sellos de calidad o en catálogos de salud, porque de esta manera sabremos que son de confianza.

Mejoras en el control de la glucosa

Los medidores de glucosa capilar han ido evolucionando a lo largo de los años. Actualmente disponemos de medidores con prestaciones avanzadas que permiten configurar parámetros adaptados a cada persona e incluso algunos que pueden dar mensajes sobre recomendaciones de actuación según un valor de glucosa. Por ejemplo, en el caso de tener una hipoglucemia, podría salir un aviso recomendando tomar un aporte de hidrato de carbono de absorción rápida.

No hay que descartar por completo, los controles de glucosa capilar, pero gracias a la monitorización continua de glucosa (MCG), si podemos reducir el número de éstos. Que esta monitorización sea de una manera continua o discontinua se consigue a través de lo que llamamos un sensor de glucosa adherido a la piel, insertado con una aguja que se retira después de la aplicación en una zona subcutánea (brazo, abdomen o nalga, según el fabricante) y que habrá que cambiar cada varios días (según el dispositivo). Una vez colocados podrás seguir con tu día a día habitual y dispondrás de datos de glucosa actualizados en cualquier momento, sin tener que dejar de hacer ninguna actividad por tener que parar a realizar un control de glucosa capilar (como ir en bici o bañarte en la piscina).

Los medidores continuos permiten conocer cuál es el valor de la glucosa de forma constante y los discontinuos o flash, para saber el valor de la glucosa, requieren acercar un lector o receptor a ese sensor. En cualquiera de los casos, se pueden configurar alarmas en valores individualizados para que este receptor pite o vibre en caso de, por ejemplo, una hipoglucemia o una hiperglucemia. ¿Creéis que este valor de glucosa que da el sensor será exactamente el mismo que si os hacéis un control capilar? Pues hay que tener en cuenta que no porque hacen la lectura de la glucosa en lugares distintos, aunque probablemente serán similares. Hay que conocer que estos sistemas no “miran” la glucosa en sangre, sino en otro lugar llamado líquido intersticial (es el espacio debajo de la piel, entre las células), por lo que siempre habrá una diferencia, que podrá ser mayor o menor dependiendo de lo estables o variables que sean los valores de glucosa en ese momento.

Mejoras en la administración de la insulina

Ya hay en el mercado, para aquellas personas que están en tratamiento con múltiples dosis de insulina, plumas inteligentes que permiten almacenar la información relacionada con la inyección de insulina administrada con ese dispositivo. Es decir, podemos saber la dosis administrada, la hora en la que se administró e incluso, si van vinculadas a sensores de glucosa, permiten recomendar ajustes de dosis de insulina personalizados.

También se dispone de infusores de insulina subcutánea, generalmente conocidas como bombas de insulina, que permiten la administración de insulina de una forma constante y que permiten una mejor adaptación por tramos horarios. Permiten programar una cantidad de insulina que se irá administrando de forma constante durante todo el día. Estas bombas de insulina todavía no funcionan totalmente de forma autónoma, aunque sí hay modelos más automáticos mejorados que logran conseguir muy buenos resultados, siendo capaces incluso de reducir o suspender la entrada de insulina ante la predicción de hipoglucemias o aumentarla ante hiperglucemias según los datos que le proporcione un sensor de glucosa vinculado. Pero todavía se necesita avisar al dispositivo cada vez que se va a realizar una ingesta registrando el número de raciones de Hidratos de Carbono para que la bomba, según los parámetros previamente programados, pueda recomendar una cantidad determinada de insulina.

También se están introduciendo otro tipo de bombas de insulina como son las bombas parche o microbombas. Este tipo de bombas han sido diseñadas para romper muchas de las barreras de la terapia con bomba tradicional. Al no disponer de tubos, ser pequeñas, ligeras e ir adheridas a la piel como un sensor, proporcionan una comodidad y discreción al usuario superior al de las bombas convencionales.

Y ya para acabar, comentar que en cualquiera de estas tecnologías no sólo existe un solo dispositivo, sino que hay muchos laboratorios farmacéuticos o tecnológicos trabajando en ellos. Debido a esto, hay varias opciones posibles para escoger, pero no todos están disponibles en todos los lugares, puede depender también de otros criterios de financiación actuales, de si hay una indicación específica para poder optar a ellos, del tipo de diabetes que tengas, del tipo de tratamiento insulínico que lleves, etc. Tu equipo de salud te informará de las opciones y consensuará contigo, la mejor opción individualizada para ti.

Carla cabre - Enfermera de Práctica Avanzada en Atención y Educación Terapéutica en diabetes.
Carla Cabré Font
Enfermera de Práctica Avanzada en diabetes.